Hace apenas unas horas que se hizo público el Decreto de Estado de Alarma sobre la Comunidad de Madrid, que permite, por fin al Gobierno de Pedro Sánchez establecer restricciones sobre una serie de municipios madrileños – veremos si acaba ahí la cosa.
Sin duda, estamos ante una venganza de Sánchez y sus secuaces contra Madrid. Hace unos días, el Tribunal Superior de Justicia de Madrid paró los pies al Ministro de Sanidad, Salvador Illa, evitando que decretase arbitrariamente sobre la Comunidad las mismas medidas que ahora se implementan por la fuerza. Es bien sabido que el actual Gobierno, la democracia y el acatamiento de las decisiones judiciales congenian tan bien como el agua y el aceite. La consecuencia: Madrid es víctima de los delirios de un Ejecutivo al que se le ha caído definitivamente la careta que escondía su rostro dictatorial.
En respuesta a las imposiciones sobre la Comunidad de Madrid, y con motivo de la celebración del 12 de octubre, Día de la Hispanidad, Vox ha convocado movilizaciones por toda la geografía nacional, a modo de protesta “contra un Gobierno criminal y totalitario”. Por supuesto, el Ejecutivo de Sánchez ha tratado – sin éxito, gracias a una nueva intervención de la Justicia – de bloquear las manifestaciones promovidas por el partido de Abascal, que anima a los ciudadanos, respetando las medidas de seguridad oportunas, a mostrar de forma contundente su oposición a la degeneración del Gobierno de la Nación.
El 12 de octubre es especial cada año – aunque les pese a los enemigos de España. Es el día en que celebramos la grandeza y la dignidad de nuestro país, rememorando los acontecimientos que nos convirtieron en faro del mundo. Pero la significación de este Día de la Hispanidad es mayor si cabe que la de otros años; las manifestaciones del próximo lunes tienen un tinte de insumisión frente a la tiranía que no encontramos en ocasiones anteriores, y que evoca otro acontecimiento histórico trascendental.
El 2 de mayo de 1808, Madrid se levantó en armas contra la Francia del déspota Napoleón, que pretendía ocupar nuestra tierra. La valentía madrileña sirvió como referencia a España entera, que en un alarde de fuerza y coraje logró expulsar al invasor. Este 12 de octubre será una nueva demostración de resistencia del pueblo español, esta vez frente a un Gobierno cuya degeneración trasciende todos los límites imaginables – un Gobierno, nunca lo olvidemos, que ha dejado morir a sus ciudadanos, y que, a fin de ejecutar sus particulares venganzas, ahora pretende ahogar la voz de los rebeldes.
Sierva este texto como llamamiento, para que todos los españoles de bien, sea cual sea su condición, apoyen las manifestaciones de resistencia del 12 de octubre. Reivindiquemos la dignidad de España. Seamos, juntos, partícipes de un nuevo hito en nuestra historia.
¡Firma la petición!
AYUDANOS A MANTENER NUESTRA INTENSA ACTIVIDAD CON UNA DONACIÓN